Voy a lo de Leti, que vive en una casa hermosa y enorme, parecida a la de Jay y Gloria en Modern Family. Nos abrazamos y ella me dice que me apure si me quiero bañar, que tenemos que salir pronto para el aeropuerto. Discutimos porque yo creo que estamos tarde y ella me dice que no, porque no despachamos valijas para ir a Disney. El baño es enorme, con muchas duchas sin puertas. Luego le pido prestado un abrigo, porque traje un solo buzo. Leti me da un saco de lana gruesa, de muchos colores, largo y pesado, con capucha. Me lo pruebo y no es mi estilo pero no está mal… Un señor negro nos recomienda ir a un barrio que está cerca del parque, que es un barrio donde las mujeres son libres.
Estamos con las chicas en una pileta. Hay dos equipos que intentan sacarle la pelota a otro. Natalí es un equipo y las demás el otro. Jula y Leti no quieren jugar, solo miran y se ríen, así que el otro equipo somos Vale y yo. Natalí nada rapidísimo desde el muelle a la orilla de enfrente, que está muy cerca. Vale la persigue. El agua es transparente verdosa.
Un colegio muy antiguo, tiene a todos los alumnos revolucionados. Unos encontraron un cofre y lo protegen, otros lo quieren robar. Me acerco a quienes lo tienen, y los engaño para que me lo dejen ver. Me dicen que no lo abra, y lo abro. Salen demonios, de los traviesos, no de los malos. Son demonios de aire que disparan ráfagas y te marean. En otras aulas liberaron a los demonios de los otros elementos y el patio es como una batalla de paintball.
