Voy con Panu a un lugar en taxi, a buscar mi valija llena. Paso por lo de mis viejos y está Delfi con un conjunto de falda y musculosa gris, que me dice que heredó de mis primas. Hablamos de que es mi cumpleaños y luego todos vendrán, pero yo dormí re mal y aún tengo que limpiar.
Llego a la casa y tía Yani está tratando de dormir la siesta. Los gatos la molestan, le digo que me los llevo. Uno es Elvis, la otra es nueva. Los tengo que encerrar en un lugar para que no se pongan como locos mientras sirvo, pero la nueva se hace persona y grita y me amenaza con un cuchillo. Les sirvo la comida y les digo llorando que nunca más les compraré comida húmeda porque no se saben comportar.